Cuándo comprar el primer móvil al niño

590
cuando comprar a los niños un móvil

En los Estados Unidos, la media de edad en la que los niños empiezan a tener teléfonos móviles se sitúa en 10,3 años, mientras que en España, según el INE, lo tienen el 29,7% de los niños de 10 años, el 42,2% de los niños de 11 años y el 69,5% de los niños de 12 años. En cuanto a los adolescentes, el 84% de ellos lo poseen.

En realidad, desde los dos o tres años de edad los niños suelen empezar a asomarse al teléfono móvil de sus padres familiarizándose rápidamente en su manejo y funcionalidades antes incluso de saber hablar con cierta fluidez. Algunos estudios afirman que en la actualidad incluso cerca de un 22% de niños de entre 6 y 9 años ya tienen su propio dispositivo.

A la vista de la generalización del uso del teléfono móvil entre los niños españoles (al igual que en el resto de países desarrollados) la pregunta que surge inmediatamente es sencilla ¿A qué edad se debe comprar el teléfono móvil a un niño?

En principio una gran mayoría de expertos recomienda que los niños no dispongan de su propio teléfono móvil antes de los 12 años. Sin embargo, otros aspectos a tener en cuenta como son la madurez del niño o las circunstancias específicas de su estilo de vida, nos llevan a la conclusión de que, aunque la edad mencionada es una buena referencia, no hay una edad concreta.

Por lo tanto, la pregunta que deberíamos hacernos no es tanto la edad a la que el niño debe tener un teléfono móvil, sino para qué y cómo lo va a utilizar. En este sentido es básico encontrar un contexto adecuado y empezar a educar a los niños sobre el uso del móvil desde edades bien tempranas. Llegado el momento de que el niño tenga su propio teléfono móvil, la clave para prevenir que haga un mal uso o incurra en comportamientos de riesgo con el dispositivo, estará en saber orientar bien los aprendizajes en una relación de confianza desde la que progresivamente iremos dotándoles de una mayor autonomía, más que en prohibirlo radicalmente.

Pautas básicas para que el niño haga un uso responsable del móvil

Una vez que se ha tomado la decisión de darle un smartphone al menor, no está de más recordar algunas pautas que nos ayudarán a facilitar que el niño o joven haga un uso responsable del mismo.

Establecer unas reglas claras.

Hay que tener en cuenta que no le estamos proporcionando un simple teléfono, le estamos dando un tesoro que le permite descargar música, películas, juegos y aplicaciones y además le da acceso a toda clase de información de forma inmediata y a su participación en redes sociales. Por lo tanto, no está de más establecer un número de minutos y tiempo de conexión, lo que además le ayudará a aprender a organizarse.

También hay que dejarle claro que no puede descargarse una aplicación o comprar un servicio sin nuestra supervisión y aprobación.

niños que usan móvil

Limitar los horarios de uso.

Hay que delimitar los momentos en los que no se puede usar el teléfono móvil. Por ejemplo, no es conveniente que se vayan a la cama con el dispositivo ya que las relaciones sociales pueden provocarle una excitación que no le permitirá descansar adecuadamente. También, las horas del estudio son sagradas y se deben dedicar a ello en exclusiva. Las comidas deberían ser un momento en familia y libre de mensajes. Por supuesto, es fundamental que los padres se apliquen las mismas reglas ya que son el modelo a seguir por sus hijos.

Ayudarles a gestionar sus relaciones.

Gestionar el móvil de nuestros hijos es más importante de lo que parece ya que se van a sumergir en un mundo de adultos para el que no están preparados. Por supuesto, tienen derecho a la privacidad pero deben entender y aceptar que habrá cosas de su smartphone que gestionaremos nosotros. Por ejemplo, el acceso a contenidos inapropiados, el acoso entre menores o el acoso de adultos a menores son temas que se deben tratar con los niños y sobre los que hay que dejar claras las pautas de actuación.

Enseñar un uso respetuoso.

Bajo el principio de no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti. Tiene que quedar claro que un mensaje a través de Whatsapp o cualquier red social es igual de grave que cualquier insulto en persona. Y cualquier ataque, humillación o broma pesada a otra persona, puede llegar a ser un delito.

Efectos negativos del móvil para su salud

Un estudio dirigido por Sir William Stewart, miembro del Consejo Nacional de Protección Radiológica de Gran Bretaña, concluyó que los niños menores de ocho años nunca deberían usar teléfonos móviles y los que están entre los nueve y los catorce años de edad deberían restringir su uso al mínimo y sustituir buena parte de las llamadas por mensajes de texto. “El cráneo de los niños no es suficientemente grueso, su sistema nervioso no está totalmente desarrollado y la radiación que emiten los teléfonos móviles penetra con más fuerza en sus cerebros.”

Esta debería ser una poderosa razón para que los padres analicen detenidamente si resulta verdaderamente provechoso comprar estos dispositivos a sus hijos teniendo en cuenta los daños que podrían provocar a su salud tanto a corto, como a largo plazo.

móvil

Existen numerosos estudios alertando sobre los diferentes efectos negativos para la salud derivados del uso de teléfonos móviles con diversas conclusiones, como por ejemplo que cuando alguien habla por el móvil, su cabeza absorbe entre el 70 y el 80% de la radiación emitida por la antena con sus consecuentes efectos negativos; que puede afectar algunas funciones cerebrales; que su uso durante más diez de años aumenta en cuatro veces la probabilidad de desarrollar tumores en los oídos; o que la radiación puede causar daños en el ADN que es donde se deposita la información genética que luego se transmite hereditariamente, entre otros.

Sin embargo, las compañías de móviles aducen que no hay evidencias científicas definitivas sobre el peligro que pueden suponer los teléfonos móviles para la salud de las personas. La realidad es que, por increíble que parezca tras casi 30 años de uso de la telefonía móvil, no hay ningún estudio aceptado como concluyente sobre el riesgo que suponen para la salud y se necesita más investigación.

Entretanto, los padres no deberíamos ser presas del pánico pero, hasta que se publique algún estudio concluyente, sí resulta recomendable adoptar ciertas precauciones como pueden ser las siguientes:

  • Enviar mensajes de texto, utilizar el altavoz del móvil o el kit manos libres en cuanto sea posible.
  • Realizar llamadas cortas y sólo las que sean esenciales.
  • Intentar separar el móvil 2,5cm de la cabeza cuando se está hablando.
  • Evitar llevarlo siempre pegado al cuerpo (bolsillos por ejemplo)
  • Para ver una película es mejor descargársela primero evitando así una exposición a la radiación innecesaria.
  • Estar atento a la potencia de la señal del móvil ya que cuanto más débil sea mayor será el esfuerzo del teléfono emitiendo más radiación.
  • Evitar hacer llamadas en trenes, ascensores, coches o autobuses ya que el móvil se esfuerza más para obtener la señal aumentando el nivel de radiación.
  • Evitar dormir con el móvil en la mesilla de noche.