La comarca ribereña de los embalses de Entrepeñas y Buendía se encuentra situada a caballo entre las provincias de Cuenca y Guadalajara y constituye un auténtico tesoro para realizar múltiples actividades en plena naturaleza a tan sólo una hora y media de Madrid en coche. En ella encontramos célebres y singulares paisajes como La Alcarria, el Alto Tajo o la Sierra de Altomira, entre otros. Se trata de un territorio donde predominan los páramos y campiñas y en el que los ríos Tajo y Guadiela han ido erosionando el paisaje formando grandes cañones y barrancos.
En la actualidad la comarca no vive sus mejores momentos debido a la tremenda sequía que arrastra desde hace varios años que, sumada a los repetidos trasvases a la cuenca del Segura, han llevado a ambos embalses a niveles mínimos que limitan tremendamente las actividades náuticas, algo que ha provocado el desplome del turismo en la zona. A pesar de ello, los amantes del senderismo y las bicicletas de montaña encontrarán un sinfín de rutas jalonadas por espectaculares paisajes sobre las que practicar su deporte favorito.
La comarca cuenta con 46 rutas distintas de diferentes distancias y dificultades que son aptas para todos los públicos, sumando entre todas ellas un total de 525 km de itinerarios. Todas ellas están reseñadas en la web de la Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía para que cada uno pueda elegir la que mejor se adapte a sus condiciones. La gran mayoría de ellas se pueden recorrer tanto a pie como en bicicleta de montaña.
Gastronomía típica de la Alcarria
La Alcarria ofrece una variada gastronomía en la que los grandes protagonistas son el cordero y el cabrito, pero que también incluye innumerables formas de degustar el conejo y otras especies abundantes en la zona. Las perdices y codornices a la alcarreña, el pollo a la miel de romero, el morteruelo de caza, las migas, los zarajos y el cocido del Madroñal con albóndigas, entre otros, conforman una gran variedad de exquisiteces que no defraudarán a los paladares más exigentes.
A estos manjares típicos de las zonas de interior, se unen los pescados procedentes de los ríos que trascurren por la comarca entre los que son muy apreciados el lucio ahumado, la trucha y el cangrejo. Asimismo, las verduras que crecen en el entorno permiten la preparación de suculentos platos como las patatas guisadas con níscalos, el pastel de berenjenas, el pisto o la costrada de calabacines, por ejemplo.
Y no nos podemos olvidar de los dulces, cuya principal característica es que se producen con miel, el producto más característico de la Alcarria. Los bizcochos borrachos, los melindres, las monillas, los mostachones, las torrijas, las tortas de chicharrones… harán las delicias de los más golosos de la familia.
Dónde alojarse
En la comarca se pueden diferenciar dos zonas en función de cada uno de los embalses que las riegan y la provincia en la que se encuentran (Entrepeñas en Guadalajara y Buendía en Cuenca).
En la parte de Guadalajara (embalse de Entrepeñas), Alocén es un pequeño pueblo, de menos de 200 habitantes, en el que destaca la plaza, mirador sobre el embalse de Entrepeñas, y el conjunto de sus calles que recibió el premio al embellecimiento de los pueblos de España en 1981. Allí se encuentra la casa rural El Molino de Alocén que dispone de 6 habitaciones dobles completamente equipadas, salón con chimenea, porche cubierto y jardín con barbacoa, desde cuyas ventanas se aprecia una bella panorámica del embalse. Se pueden alquilar habitaciones sueltas a un precio desde 25€ por persona y día o la casa completa para todo el fin de semana por un precio de 620€. Resulta ideal para grupos de 12 o 14 personas o familias con hijos. A escasos 80 metros se encuentra el polideportivo municipal.
En el municipio de Sacedón, a orillas del pantano de Entrepeñas y muy cerca del pantano de Buendía, se encuentra el Hotel Mariblanca, donde estuvo alojado Camilo José Cela durante su viaje por la Alcarria, que dispone de habitaciones dobles y sencillas, todas con baño, jardín, zona chill out, piscina y salón social. En su restaurante se pueden degustar 3 tipos diferentes de menús o comer a la carta. La habitación doble, con alojamiento y desayuno incluido, cuesta 55€/noche y las individuales 30€/noche.
En la zona de Cuenca (embalse de Buendía), Buendía es el pueblo más relevante y su diseño sigue el patrón urbano de los pueblos medievales con una disposición radial. Dispone de varios edificios emblemáticos como el Museo del Carro que alberga una muestra de los diferentes tipos de carruajes utilizados en la zona; la Antigua Botica, con 400 recipientes de loza donde se guardaban las medicinas y la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción levantada entre los siglos XV y XVI, entre otros. Si os animáis a pasar el finde, podéis recorrer la Ruta de las Caras en bici o paseando.
Justo en la parte opuesta del pantano de Buendía se encuentra Castejón, un pequeño pueblo de 200 habitantes en el que destaca su Iglesia Parroquial del siglo XVII, la Ermita de la Caridad y las Cuevas del Vino situadas en una ladera cercana a la población. Allí resulta muy recomendable alojarse en el Hostal Barón con una excelente relación calidad precio y en cuyo restaurante podrás degustar sus espectaculares croquetas.
Luis Fajardo
