Cuando se habla de comida saludable, por lo general, se suele asociar a aquella que responde a las etiquetas baja en calorías, vegetariana, sin gluten… Y es cierto, pero cuando nos referimos a las recetas dulces -¡Mmm!-, el concepto saludable hace referencia a pasteles o postres elaborados con ingredientes naturales, que no estén muy procesados y, sí, también que lleven poca azúcar. Pero como ¡dos días son dos días!, ¿quién no se merece un regalazo para el paladar en momentos puntuales?. Una selección de las pastelerías más saludables de España.
Nuestro país cuenta con excelentes y premiadísimos reposteros -de algunos de ellos ya os hablamos en nuestro anterior artículo Los lugares más dulces de España-. En nuestra pequeña selección de pastelerías no están todos los que son pero son (buenos) todos los que están. Destacamos sus productos estrella.
Horno de San Onofre (Madrid): Corona de la Almudena y Roscón de Reyes
Con obrador propio, con buenísimas materias primas, con la ‘prohibición’ impuesta por los propietarios de la elaboración industrial y la especialidad en los dulces madrileños y elaboraciones de temporada, estas pastelerías –hay tres en Madrid con distinto nombre- son reconocidísimas por su Corona de La Almudena. El 9 de noviembre se celebra la fiesta de la patrona de la capital y también de los pasteleros, pero desde días antes esta variación del Roscón de Reyes se vende en muchos establecimientos. No es un bollo típico muy antiguo, ya que su origen se remonta a 1978. En el Horno de San Onofre es un producto estrella al igual que el Roscón.
Pero hay más. Entre las elaboraciones típicas de Madrid son exquisitos los bartolillos, los pestiños, las rosquillas de San Isidro, los panecillos de San Antón, los buñuelos y destacan también sus torrijas hechas con pan bombón. Las tartas, como la de Santiago –sin harina-, están buenísimas. Y para los menos dulceros cuentan con gran variedad de panes de calidad y de picoteo salado (estupendas miniquiches). Lo mejor, acercarse, comprobarlo y probarlo. Volveréis, seguro.
Dónde. Horno de San Onofre. Calle San Onofre, 3. Hernani. Calle Hernani, 7. La Tahona. Calle Hortaleza, 9. También tienen tienda gourmet en el Mercado de San Miguel (Plaza de San Miguel s/n).
Oriol Balaguer y La Duquesita (Barcelona y Madrid): cruasanes y chocolate
El repostero de Calafell (Tarragona) es uno de los más premiados de nuestro país. Sus galardones y reconocimientos son innumerables; el último el de Mejor Chef Pastelero de la Academia Internacional de Gastronomía 2018. Claro que hablando de especialidades, hay que destacar el de Mejor Croissant Artesano de Mantequilla de España en 2014 y el de Mejor Postre del Mundo 2001: 8 Texturas de Chocolate. En sus locales de Barcelona triunfan, sobre todo, las creaciones con chocolate y, en especial, la Mona de Pascua.
De la capital catalana se trajo Balaguer a Madrid la tradición chocolatera con buen resultado. Lo mismo que trasladó a sus tiendas de Barcelona los populares barquillos madrileños o las violetas. Hace ya diez años que abrió la boutique-pastelería madrileña, en el barrio de Salamanca –merece la pena visitarla-, y, a pesar de la crisis, sus productos de gran calidad crecen en aceptación. No conforme con eso, en 2015, tomó las riendas de una pastelería centenaria de la capital, La Duquesita. Allí se venden los exquisitos y premiados cruasanes y también muchas delicias de chocolate.
Dónde. Barcelona: Oriol Balaguer (Travessera de les Corts, 340). Classic Line Oriol Balaguer (Carrer de Benet Mateu, 62). Oriol Balaguer (Plaça de Sant Gregori Taumaturg, 2). Madrid: Boutique Oriol Balaguer (Calle José Ortega y Gasset, 44). La Duquesita (Calle Fernando VI, 2).
Arrese (Bilbao): trufas de chocolate
Los bombones y las trufas, pero también las pastas de té, las florentinas y las tejas, así como sus elaborados pasteles y tartas, son los productos de nota muy alta de esta reconocida firma pastelera artesanal de la capital vizcaína.
Abrió sus puertas en 1852 en el Casco Viejo de Bilbao. Ya entonces elaboraban sus famosas trufas con el mejor chocolate y con nata y mantequilla en su interior. Hoy se pueden encontrar, en las tres tiendas con las que cuenta la ciudad, también con esencia de café, de baileys o cointreau o al coñac con naranja.
Dónde. Gran Vía, 24. Calle Rodríguez Arias, 29. Calle Ercilla, 29.
Martina de Zuricalday (Bilbao): bollos de mantequilla
Otra pastelería artesanal centenaria (abrió en 1830 y es la más antigua del País Vasco) con una receta a buen recaudo, secreta, de sus afamados bollos de mantequilla. Sus dulces, en especial hojaldres, macarons y pasteles, fueron solicitados varias veces por la reina Victoria y el rey Alfonso XIII.
Pero como lo artesano no está reñido con la vanguardia, esta pastelería recibió, entre otros, el Premio a la Tradición con Futuro. Todos sus productos son naturales y frescos y están decorados a mano. No lo penséis, probad los excelentes bollos.
Dónde. Calle Ercilla, 43. Calle Rodríguez Arias, 48. Plaza San José, 3.
La Pequeña Pastelería de Mamá (Valencia): tartas personalizadas
Con el propósito –ya más que cumplido- de aunar la ‘repostería de la abuela’ con las más creativa nació este exquisito local en el centro de la capital valenciana. Su dulce carta es muy amplia: merenguitos, cupcakes, alfajores, galletas, macarons… y sus tartas de fondant personalizadas, a gusto del cliente (los diseñadores de la firma ayudan y mucho). A los peques seguro que les encantarán sus donuts personalizados.
La tienda reserva una parte para cafetería. En ella se pueden degustar diferentes cafés y tés acompañados de dulces caseros.
Dónde. Carrer del Poeta Josep Cervera y Grifol, 14. Valencia.
Si no vivís en estas ciudades y tenéis previsto visitarlas en un futuro que nos sea permitido, no lo dudéis, uno de los destinos más deliciosos son estos exclusivos templos del dulce.
