Mis rutas favoritas de senderismo con niños (II) en la Comunidad Valenciana

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Senda del Botánico Calduch (Castellón)

Se trata de una senda verde de 4 km, que recorre el río Mijares a su paso por Villareal desde la ermita de la Mare de Deu de Grácia hasta el puente medieval de Santa Quiteria en Almazora. En la orilla del río es donde el botánico Manuel Calduch empezó su herbario, que da nombre a la ruta.

Para llegar a la ermita, donde se inicia la ruta, primero hay que dirigirse al restaurante el Molí hasta que se encuentra un amplio parking. Desde allí se bajan unas escaleras hasta una fuente llena de peces en la que los niños pueden hacer una primera parada y un poco más abajo un pequeño parque infantil donde se encuentra una piedra grande que marca el inicio de la ruta.

La senda es muy amplia al principio con buen firme por todo el recorrido, aunque no apto para carritos de bebé y por de camino se pasa por la antigua Acequia Mayor de Villareal que desemboca en río Mijares. Hay un par de tramos más estrechos donde es necesario agacharse para atravesar sendos túneles. Encontraremos zonas de descanso con bancos, las ruinas del Molino de Bisbal y un variado arbolado típico de rivera formado por olmos, chopos, álamos, sauces y almeces. Cuando se llega al puente de Santa Quiteria es un buen momento para comerse los bocatas y, desde allí, el retorno se hace volviendo sobre nuestros pasos. Con niños pequeños y mucha calma, toda la ruta no debería requerir más de dos horas.

Ruta del Agua de Chelva (Valencia)

Es una excursión de unas tres horas de duración que combina historia con naturaleza persiguiendo el legado hidrológico de la rivera del río Tuéjar. El trayecto está jalonado por diferentes fuentes, acequias y lavaderos y, sobre todo, por el río Tuéjar.

La ruta se inicia en la Plaza Mayor de Chelva y transcurre por su centro histórico y por parajes singulares del río. Dentro de la ciudad se recorre el barrio judío del Azoque, el barrio morisco del Arrabal, la ermita barroca de los Desamparados, el Antiguo Ayuntamiento y el barrio Cristiano Medieval.

Tras abandonar la villa siguiendo las indicaciones de la ruta, se sigue el camino del río Tuéjar disfrutando de una vegetación repleta de chopos , baladres y cañares.  Esta ruta destaca también por sus legados arquitectónicos incluyendo restos de antiguos molinos harineros y bataneros de origen árabe. El camino incluye zonas recreativas, miradores y túneles que añaden un atractivo a este precioso paisaje. En los alrededores llama la atención el acueducto romano de la Peña Cortada.

El sendero cuenta con la singularidad de transcurrir por un viaducto que pasa por encima de un acueducto y por los restos del antiguo Molino Puerto de origen medieval. A escasos metros del molino se encuentra la Playeta que, con sus cascadas y saltos, es una zona tradicional de baño. Aguas arriba se encuentran rincones de gran belleza como la a Mozaira, Orán u Olinches, de origen árabe. El Paso de Olinches, un túnel de 107 metros (en estos momentos se halla cerrado para evitar aglomeraciones y contagios), permite adentrarse en uno de los parajes más extraordinarios del río por donde discurría el agua desde la presa de Olinches, último tramo de la ruta, hasta la Fábrica de la Luz .

Ruta del Faro de Albir (Alicante)

Situado en el extremo norte del Parque Natural de la Serra Gelada, el Faro del Albir ofrece una ruta para realizar una sencilla y accesible excursión con toda la familia. El camino es prácticamente llano y su recorrido es lineal con una longitud de 5km en total entre ida y vuelta ofreciendo unas magníficas vistas.

El paseo se inicia en desde el punto de información de l’Albir siguiendo un camino asfaltado. Al poco tiempo se encuentra una zona recreativa con sombra y algunas mesas. Un poco más adelante nos encontraremos con la bifurcación de la ruta amarilla (La Travesía de la Serra Gelada) que es dificultad media/alta y recorre toda la cresta de la sierra.

El camino está jalonado por varios miradores a los que se accede mediante pequeñas sendas o escaleras. Desde ellos se pueden contemplar la Bahía de Altea, la Serra de Bèrmia, el Peñón de Ifach (Parque Natural) y unos impresionantes acantilados y dunas fósiles.

En el final de la ruta nos espera el Centro de Interpretación del Faro del Albir, donde se puede visitar una interesante exposición de fotografías sobre el propio Faro.