La pequeña villa abulense de Bonilla de la Sierra, en el Valle del Corneja y muy cerca de otros dos bellos pueblos, El Barco de Ávila y Piedrahíta, acumula en sus solo 55 kilómetros cuadrados una gran riqueza cultural y paisajística. Acaba de ser distinguido como uno de los 11 nuevos Pueblos más Bonitos de España, reconocimiento recibido en la última edición de la Feria Internacional de Turismo de Madrid (FITUR). Con él y con las otras diez localidades premiadas este año, nuestros pueblos más bellos ya suman 79.
Un tesoro en el interior de la península
Bonilla de la Sierra fue lugar de descanso de nobles, monarcas y obispos. Está ubicado a menos de media hora en coche de Ávila y a poco menos de dos horas de Madrid. Os recomendamos visitarlo (lo mismo que haremos con la llegada del buen tiempo con el resto de los pueblos que han recibido la distinción) porque podréis disfrutar de un lugar único con vestigios de varias culturas. Y, como los peques, bien abrigados, casi nunca tienen frío, os animamos a recorrer sus calles, con casonas nobles y escudos heráldicos, ver los restos de la muralla que acordonaba la villa y la bella Colegiata de San Martín (siglo XV). Ésta está situada en la preciosa plaza porticada.
Aunque la visita sea solo exterior, merece la pena acercarse y rodear el Castillo, cuya construcción, del siglo XII, con remodelaciones en los siglos XIV y XVI, se levantó como lugar defensivo. En la actualidad mantiene un patio central cuadrado, porche, la conocida como panera (con tres estancias), la Torre del Homenaje y el Patio de los conejos. Tampoco hay que olvidar el pozo romano, con sus recorrido de escaleras, o el Puente de Chuy, románico y en el norte del municipio. El encanto de este pueblo no es algo nuevo, en 1983 fue declarado Conjunto Histórico Artístico, pero sí algo a descubrir.
Parada y tentempié
Aunque seguro que, a partir de ahora, aumentará su infraestructura de cara al turismo de interior, se puede pasar allí una deliciosa jornada recorriendo sus medievales calles empedradas y también disfrutando de la gastronomía de la zona. Os recomendamos el Bar Corrales, una apuesta segura para los más pequeños de la familia, ya que sirven deliciosas hamburguesas, pero con otros productos destacados. El desayuno, tentempié o aperitivo también tienen cabida, ya que abre todos los días, de 9:00 a 20:30. Si vais más adelante, cuenta con una gran terraza. También en el restaurante El Rubio podéis reconfortaros con las famosas judías de El Barco, las buenísimas carnes o los platos de cuchara, como sus famosas patatas revolconas.
Otra opción es visitar el cercano pueblo de El Barco de Ávila. Además del Castillo de Valdecorneja y el Puente Medieval, en esta antigua villa que perteneció a la Casa de Alba, enclavada en el Parque Natural de la Sierra de Gredos, se puede practicar senderismo. Volveremos a este lugar en verano, ya que cuenta, por otro lado, con excelentes zonas para el baño y el campismo. Una buena apuesta para disfrutar de su producto estrella, las judías, es Casa Lucio (Calle de la Pasión, 3. Teléfono: 920 34 07 59). Destacan también sus croquetas, el chuletón y no olvidéis pedir una ración de queso. El horario es de 13:30 a 16:00 (cierra los jueves).
Si optáis por pernoctar en la zona para disfrutar más de ella durante un fin de semana, hay varios alojamientos rurales en localidades cercanas, como Piedrahita (también muy interesante para visitar y conocer, por ejemplo, su palacio ducal). Podéis encontrar buenas ofertas de casas rurales en clubrural.com.
Los otros pueblos con encanto
Como señalamos al principio de este tema, os iremos recomendando la visita a los otros diez pueblos, en la costa o en el interior, destacados por la Asociación Los Pueblos más bonitos de España. Entre ellos, están Níjar (Almería), Tazones (Asturias), Carmona (Cantabria), San Martín de Trevejo (Cáceres) o Viniegra de Abajo y Viniegra de Arriba (en la bella comarca de Las 7 Villas, en La Rioja).
